Las casas son dos edificios situados en la cornisa que divisa el río Duero y la vega, cerca de la iglesia de San Antolín, conocidos como “Las Casas del Tratado” de finales del siglo XV uno y del XVII el otro, señala la tradición la firma del Tratado de Tordesillas el 7 de junio de 1495 entre las coronas de Castilla y Portugal.
Fueron restaurados y rehabilitados para convertirlos en usos culturales.
La casa más antigua conserva la fachada primitiva; tiene basamento de sillería piedra en la primera planta, con puerta de arco carpanel que conduce a un zaguán y ventana de iluminación. La segunda planta presenta balcones sobre tirantes de hierro y está construida en ladrillo al igual que la última con dos huecos para mirador y cornisa y alero. En la esquina torreón, como era típico en todas las construcciones solariegas medievales y del comienzo de la Edad Moderna. Tres escudos dos soportados por leones, el otro de los Reyes Católicos cerrado bajo alfiz. Será de los años finales del XV.
El protagonismo del puente medieval de Tordesillas, radica en que esta construcción ha condicionado y dado origen a la villa. Fue fundamental para la comunicación del centro con el noroeste peninsular. La repoblación medieval de la villa fue unida a la construcción y defensa del paso sobre el río Duero. El puente de Tordesillas sobre el río Duero data aproximadamente de mediados del siglo XIII.
Entre los siglos XVI y XVIII se remodeló su estructura, levantándose un perfil de piedra que ha sido sustituido por el actual de hierro.